viernes, 19 de abril de 2013

EL NIÑO, SU CENTRALIDAD Y SUS DERECHOS


La Declaración de los Derechos Humanos es para mí de las más importantes de la historia del hombre, ya que con estas directrices se abolieron muchas atrocidades que unos hombres hacían hacia otros como por ejemplo: la esclavitud. Creo que estos derechos son imprescindibles para entender las sociedades democráticas tal y como las conocemos hoy.
Por tanto, en lo que respecta a  nuestro trabajo como docentes, es decir, al niño debemos tener en cuenta que la Convención sobre los Derechos del Niño sostiene que los derechos de la infancia se basan en cuatro principios fundamentales:

  •           La no discriminación: todos los niños tienen los mismos derechos.
  •           El interés superior del niño: cualquier decisión, ley, o política que pueda afectar a la infancia tiene que tener en cuenta qué es lo mejor para el niño.
  •           El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo: todos los niños y niñas tienen derecho a vivir y a tener un desarrollo adecuado.
  •           La participación: los menores de edad tienen derecho a ser consultados sobre las situaciones que les afecten y a que sus opiniones sean tenidas en cuenta.

A pesar de esto en mi opinión muchos de estos y otros derechos de cualquier ser humano están siendo violados diariamente. Empezando por los países con un sistema político totalitario o en guerra que los violan abiertamente, pero también pasando por muchos de los países que decimos que están desarrollados y donde se saltan deliberadamente estos derechos.
Por ejemplo en España estamos viviendo un ataque explicito hacia uno de los derechos que es la educación pública y gratuita, donde cada vez más colegios son privados y se van delimitando nuevas reformas educativas que atacan directamente al sector de la educación.
Asimismo,  últimamente están creciendo el número de casos de maltrato infantil  y de bullying. Muchos niños son maltratados por la gente que les rodea y este maltrato no tiene porqué ser solamente físico, hay otras formas de maltrato como el psicológico.Con los niños hay que respetar sus derechos e intentar que los que les rodean también lo hagan.  Por tanto, como futuras docentes,  debemos prestar atención en la clase para observar si algún niño puede sufrir  maltrato, bullyng e intentar solucionarlos. Por ello es importante también que los padres colaboren con la escuela.

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